
Señor, dales el descanso eterno, y brille sobre ellos la luz eterna. Descansen en paz. Amén.
(cf. Ritual de exequias, indulgencia parcial, aplicable solamente a las almas del purgatorio.)
Almas santas, almas purgantes, rueguen a Dios por nosotros, que nosotros rogaremos por ustedes para que El les dé la gloria del paraíso.
Padre eterno, te ofrecemos la sangre, pasión y muerte de Jesucristo, los dolores de la Santísima Virgen y los de San José, por la remisión de nuestros pecados, la libertad de las almas del Purgatorio y la conversión de los pecadores. Amén.
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo Jesús, en unión con las misas celebradas hoy día a través del mundo por todas las benditas animas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y dentro de mi familia. Amen.
(El Señor le dijo a Sta. Gertrudis que cada vez que rezara esta oración, podría librar 1000 almas del purgatorio.)
Señor, a todos los que por amor a ti se han hecho nuestros bienhechores, dígnate recompensarlos con la vida eterna. Amén.
Oración con agua bendita por las almas del purgatorio
Por esta agua bendita y por tu Sangre Preciosa, Oh Señor, concede el eterno descanso a las santas almas del purgatorio. Amén.
Por esta agua bendita y por tu Sangre Preciosa, Oh Señor, concéde el eterno descanso a las santas almas del purgatorio. Amén.
