Javier Viesca - Los tiempos, ya están terminados, estáis viviendo en el tiempo de la Purificación

Post Reply
User avatar
mdc
Rank level 20
Rank level 20
Posts: 397
Joined: 22 Jan 2020, 15:37

Javier Viesca - Los tiempos, ya están terminados, estáis viviendo en el tiempo de la Purificación

#1

Post by mdc »

Message to: Javier Viesca.
Website: (spanish) http://diospadresemanifiesta.com
Message:

Los tiempos, ya están terminados, estáis viviendo en el tiempo de la Purificación

Noviembre 26, 2021

Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.

Visión: Veo el Nacimiento del Niñito Jesús, está San José a la derecha, y con él a su izquierda hay otras personas, me imagino serán los pastores que el Ángel llevó.

Me Dice Dios Nuestro Señor:

Mi Nacimiento, Mis pequeños, fue un parteaguas para toda la humanidad, traje la Luz al Mundo, traje el Perdón de vuestros pecados, traje la Vida que se había perdido por tantos pecados y difícilmente tenían forma de recuperar la vida de la Gracia.

Me di por todos vosotros, buenos y malos, porque fuisteis creados por Mi Padre para Su Gozo y para vuestro gozo, si cumplís lo que Él os ha mandado: los Mandamientos en la vida diaria, en la que vosotros debéis mostrar a los hombres, a vuestros compañeros de misión, que estáis cumpliendo lo más perfectamente posible, lo encomendado por Mi Padre.

Todos tenéis la obligación de cuidar de vuestra misión y de ayudar a vuestros hermanos, que también cumplen la suya, pero, es tanta ya la maldad de satanás, como en aquél tiempo, de Mi Nacimiento, en que la obscuridad había empañado sus almas. Ahora está la humanidad de la misma forma, el mal ha empañado las almas de la gran mayoría de seres humanos que hay en este mundo.

¡Cuánta tristeza Me da esto, Mis pequeños!, porque Me di por todos vosotros, os traje la Luz que, antes difícilmente se podía obtener, porque satanás tenía tomada a, prácticamente, toda la humanidad, y vivían en graves pecados. Pero lo más triste de todo, Mis pequeños, es que: Yo os traje la Luz y, la habéis tenido ya, desde hace un poco más de hace dos mil años, y aun así preferisteis mantener ese velo que obscurece vuestra alma, ese velo de pecado, ese velo de maldad, ese velo de negación a la Voluntad de la Santísima Trinidad.

Sí, Mis pequeños, habéis traicionado la Voluntad Divina, no estáis haciendo lo que se os pidió, y vosotros mismos estáis ayudando al mismo satanás, a que ese velo de obscurecimiento a la Gracia se difunda fuertemente por toda la humanidad.

Graves errores habéis cometido a lo largo de vuestra existencia, pero si hubierais estado cumpliendo con vuestras obligaciones, la Gracia os hubiera llegado ya, recibiendo el perdón de ella, si la buscarais, porque tenéis los Sacramentos, tenéis la Gracia del arrepentimiento, tenéis todo a vuestro favor, para permanecer en esa vida de Gracia, en esa Pureza de alma, en ese Amor, que muchos hubieran querido conocer en el Antiguo Testamento.

Vosotros tenéis ahora todo y aún así lo desperdiciáis. ¡Cuánta maldad hay en vuestro corazón! ¡Cuánta negación! ¡Cuánto sacrilegio! Satanás se ha aprovechado de todo ello y fácilmente os engaña, fácilmente os sigue llevando hacia el mal, y vosotros, aun a pesar de que os dais cuenta, porque os he dado el Discernimiento Divino, ni aún así queréis estar pendientes de lo que os pertenece y que debéis defender, que es: la Iglesia, la Gracia, los Mandamientos, las Virtudes, el arrepentimiento, y sobre todo, la Verdad, que se ha perdido entre vosotros.

La Verdad, ahora es tanto error alrededor vuestro, tanta mentira, y eso os llevará, si seguís así, al lugar del castigo eterno, porque con la mentira, vosotros engañáis a vuestros hermanos, para que no busquen la Verdad, y si os dais cuenta de ello, como os dije, os habéis vuelto instrumentos de satanás.

Se burla satanás de todos vosotros, los que habéis caído y no os queréis levantar, ya sois sepulcros blanqueados, como les dije en aquél tiempo a los fariseos. Se repiten pasajes de las Sagradas Escrituras con vosotros, ahora en este tiempo. Ya no sois gente de confianza la gran mayoría de vosotros, os aprovecháis mucho los unos de los otros, no buscáis el bien de vuestros hermanos y aun así, ¿queréis y creéis que os podréis ganar el Reino de los Cielos?

¡No!, Mis pequeños, el Reino de los Cielos se gana en el sufrimiento. Sí, en el sufrimiento, empezando con el venceros a vosotros mismos, vencer vuestros vicios, vuestra maldad, vuestro olvido a cumplir con lo que Mi Padre os ha mandado cumplir, con lo que Yo os dejé con Mi Ejemplo de una Vida Santa, una Vida llena de Luz, una Vida llena de Amor.

¡Falláis tanto, Mis pequeños! ¡Falláis tanto!, y por eso hay tantas almas que se condenan, porque no estáis poniendo lo mejor de vosotros, no estáis buscando y sobre todo, defendiendo el Bien que se os ha heredado, porque Yo os heredé lo que viví, lo que os dije, lo que os enseñé y lo habéis hecho a un lado y preferís seguir haciendo vuestra voluntad, y no la Voluntad de Mi Padre y la Mía.

Habéis acallado en vuestro corazón al Espíritu Santo, que os indica vuestros errores, que os lleva a reconocer que no estáis viviendo en el Bien, pero ya no Le hacéis caso, tratáis de acallarlo de una forma o de otra, para no cumplir con el camino de vida que se os ha trazado a través de Mi Ejemplo, de Mi Vida entre vosotros, de todo el Amor que os dejé.

Mis pequeños, los tiempos, se os ha dicho, ya están terminados, estáis viviendo en el tiempo de la Purificación, y estáis viendo cómo los acontecimientos se van acrecentando, cada vez más en vuestra contra.

Quedarán los escogidos, ¿sentís cada uno de vosotros que sois de los escogidos porque habéis cumplido la Voluntad del Padre y Mi Voluntad?, si Mi Santo Espíritu os dice, en vuestro corazón, que no sois de los que están ya tomados, y sobre todo, marcados, para vuestra salvación eterna, poned de vuestra parte todo lo que podáis, para que vuestra alma quede purificada, santificada, y quizá, así os podáis mantener, como Mi Padre quiere, para ser escogidos, para vivir la nueva generación que está por venir ya, entre vosotros.

Orad mucho, Mis pequeños, orad mucho por vosotros mismos y por vuestros hermanos; ésta generación pronto terminará y empezará una nueva, a la cual se le pedirá la Santidad de vida, como siempre os hemos pedido.

Orad y pedid perdón por vuestros pecados, por vuestros errores, por vuestra traición hacia todo lo que os hemos dado.

Vivid, pues, como Yo os vine a Enseñar y así seréis salvos, así viviréis de acuerdo a Nuestra Santa y Divina Voluntad.

Gracias, Mis pequeños.

Post Reply

Who is online

Users browsing this forum: No registered users and 1 guest