Reflexión de Luz de María sobre la sanción de Ley del Aborto en Nueva York

TODOS LOS ÁNGELES EN EL CIELO DICEN EN VOZ ALTA: ¡ABOMINACIÓN, ABOMINACIÓN! ANTE CADA ACTO EN CONTRA DE MI SANTO ESPÍRITU...”
Jesucristo a Luz de María, 28.01.2019

Hermanos:

Nuestro Señor Jesucristo nos comparte el dolor en el Cielo ante la grave abominación que es el aborto, así expresan los Ángeles en el Cielo el dolor ante cada aborto realizado en la Tierra.

Hermanos, el tema del aborto es abordado en la mayoría de los países, siendo motivo de contiendas y grandes discusiones entre los que se manifiestan a favor del aborto consentido y los que se manifiestan en contra del mismo.

Desde hace varios años tanto nuestro Señor Jesucristo y nuestra Madre Santísima se han referido al aborto una y otra vez, expresando las implicaciones espirituales, morales, sociales y psicológicas que esto trae consigo. Ante los Llamados del Cielo la humanidad en gran parte hace caso omiso a las repercusiones que se nos han señalado y continúan sorprendiéndonos con una consecutiva insistencia y acciones que en cada ocasión son más abominables y diabólicas.

No puedo mirarlo desde otra óptica, sino desde la arista de la presencia del Anticristo en la Tierra, ante lo cual ya ejerce su dominio sobre la humanidad y sobre aquellos que viven cometiendo actos de repudio hacia Dios.

Dentro del contexto del aborto esta semana hemos sentido vergüenza ante la Trinidad Sacrosanta, al mirar en los medios de comunicación masiva la noticia de que el Senado del Estado de Nueva York (EEUU) aprobó por 38 votos contra 24 una “NUEVA LEY DEL ABORTO QUE PERMITIRÁ ESTA PRÁCTICA DURANTE TODO EL EMBARAZO Y QUE SEA REALIZADA NO SÓLO POR MÉDICOS“.

¿ANTE QUÉ ESPECTÁCULO DANTESCO NOS ENCONTRAMOS?

Es el mismo Infierno que se ha vertido sobre la Tierra, el mismo Satanás esparciendo la condenación para la humanidad y esto no ha tenido límites, sino que con gran despotismo hacia el resto del mundo hemos visto a hombres y mujeres, HIJOS DE DIOS, celebrar la muerte de los inocentes, lo que me lleva a pensar en el tiempo en que los romanos llevaban a los cristianos al Coliseo para ser devorados por fieras salvajes y cuando alguna de estas criaturas humanas era devorada, celebraban de pie con júbilo, aplausos y gritos.

A la vez me pregunto: ¿de qué vale que en este instante existan museos sobre el holocausto, (asesinato masivo de millones de hermanos, durante la segunda guerra mundial), si como humanidad se es indiferente ante todo dolor, y al parecer no se ha aprendido nada de ese trágico momento.

Hermanos, ¡recapacitemos!

Sin necesidad de una tercera guerra mundial declarada, que invada los títulos de los medios de comunicación masiva, ya que la tercera guerra mundial se está generando poco a poco en el mundo… “existe una guerra permanente del hombre en contra de los inocentes”. (55,7 millones de abortos al año en el mundo)

Hemos superado la mortandad de la Segunda Guerra Mundial, mejor sería cerrar los museos que han sido creados para que la humanidad no olvide tan grande padecer, ya que en este instante parte de la humanidad celebra dar muerte a criaturas humanas que viven dentro del vientre materno.

Mirar el padecer de la humanidad es doloroso, pero preguntémonos, ¿qué hace el hombre que atrae tanta fatalidad?; ¿será que quienes aprueban estos proyectos y se regocijan por el triunfo obtenido, no tienen hijos, no tienen madres que les dieron a luz para que hoy se encuentren regocijándose por estas crueles leyes? Es este el resultado del libertinaje del que nos habla nuestro Señor, del dolor que Él padece continuamente y ese grito de ABOMINACIÓN se escucha también en la Tierra.

Es la locura del hombre del siglo XX y XXI que no desea niñez, para no poseer responsabilidades y que desprecia el Don de la vida que Dios ha dado al hombre: Creced y multiplicaos, es ahora una contradicción y se ha cambiado por: crecer y dar muerte.

Es la furia del Anticristo contra los hijos de la Madre Santísima, que ha tomado a gran parte de la humanidad y la ha masificado para que no piense ni sienta ni actúe., Expongo el significado de la palabra masificar: “Dar carácter de masa uniforme a un grupo de personas, en especial haciendo perder sus características individuales”.

Es la ley de Satanás: divide y vencerás… Sabemos que el mal se encuentra ejerciendo su poder de posesión sobre la criatura humana que no desea pertenecer a la Familia de Dios y el mal agita al hombre para que llegue a aprobar leyes más diabólicas en contra de la vida.

Hermanos, con gran tristeza en el alma y con el corazón destrozado, debemos continuar clamando a Dios y ADORANDO EN ESPÍRITU Y EN VERDAD. Esperando el cumplimiento de las Revelaciones de nuestro Señor Jesucristo y de nuestra Madre Santísima, que se han presentado a criaturas humanas y se continúan haciendo presentes en la Tierra para alentarnos a ser fieles, a continuar en medio de la corriente de lo mundano, para explicitarnos Su Amor por nosotros y a la vez para llamarnos a ser incansables en la tarea de invitar a la conversión a todas las criaturas humanas, con el mismo Amor con que Cristo y nuestra Madre lo hacen con todos Sus hijos y personalmente me han dado la grandísima oportunidad de la conversión y de servir al Cielo.

Hermanos: que cada instante de nuestra vida, no sea tiempo perdido, sino un continuo llamado amoroso al hermano para salvar el alma y un continuo recordatorio personal para que no olvidemos que no somos perfectos y como humanos estamos expuestos a la tentación y ante esto tenemos que permanecer atentos y alerta para continuar en el Camino al que somos llamados.

Luz de María.

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